Incapaz el área deportiva de mantener a Cory Higgins, Sanli y Nikola Mirotic por sus elevados emolumentos -en este curso pasaría casi a 12 millones de euros y se está negociando la liquidación-, observaron cómo el técnico Saras Jasikevicius hacía mutis por el foro obviando una oferta de renovación a la baja, desapegado el lituano a la entidad porque no le convencía el nuevo proyecto deportivo -donde no habrá tantos nombres ni millones- y porque estaba dispuesto a reducir su sueldo entre un 10 y15%, pero no más de la mitad como pretendía el Barcelona.