Su capacidad para vender los derechos de retransmisión de los clubes de manera centralizada a un precio tan elevado no sólo potenciará a todo el campeonato, sino que permite que todos los clubes crezcan de manera similar sin que existan grandes diferencias entre el más poderoso y el más modesto. Los clubes comenzaron a principios de siglo a vender camisetas distintas a las que llevan los jugadores sobre el césped.